Reseña | Cine | Bugonia

Por Nahuel Tesouro

Bugonia trata sobre dos hombres paranoicos convencidos del hecho que una empresaria es un alienígena del planeta Andrómeda. Por dicha razón, la secuestran y la obligan a concederles una audiencia con el emperador de ese planeta para arreglar los términos de su retirada de la Tierra. Nada de esto es un spoiler porque, inteligentemente, el nuevo film del excéntrico Yorgos Lanthimos salta directo a la acción. Ya apenas comienza la peli escuchamos una explicación del protagonista masculino interpretado por Jesse Plemons en voz en off de sus teorías y cómo funciona su mente. También lo vemos afectando la cabeza de su primo. Y no pasa mucho tiempo hasta que vemos el secuestro en sí, siendo prácticamente toda la película lo que sucede una vez que la empresaria interpretada por Emma Stone ha sido capturada y las consecuencias de dicho acto. De esta forma, la trama agarra nuestra atención al instante y nunca nos suelta. La dirección, los diálogos, las actuaciones, el soundtrack, la fotografía, todo también conspira para mantenernos enganchados en todo momento.

 

A pesar de arrancar tan rápido y de manera vertiginosa y durar dos horas, nada se vuelve aburrido ni repetitivo ni cansino. Y no me refiero únicamente a repetitivo en cuanto a la trama en sí sino incluso comparándola con la enorme cantidad de películas de secuestro que existen. Sí, mantiene algunos clichés de ese subgénero pero, a la vez, es su propia cosa, muy diferenciable en el resto de esa cinematografía. Y gran parte de este logro es por Yorgos Lanthimos. Si bien el film comienza con sus rarezas típicas, a medida que el metraje avanza, éstas no hacen más que volverse más evidentes y extremas, satisfaciendo a sus fanáticos que buscan algo en particular siempre que van a ver una de sus películas, todas muy recomendables, tanto las que hizo en inglés como las que hizo en su país e idioma natal, griego.

 

En cuanto a las actuaciones, Jesse Plemons se consolida acá como uno de los mejores actores de su generación y de la década. Ya venía demostrándolo una y otra vez, incluso en papeles muy pequeños en cuanto su duración como es el caso de su personaje en Civil War, pero acá demuestra una destreza, una versatilidad y un rango actoral enorme. Es una de las mejores apariciones de los últimos tiempos y deseo verlo mucho más seguido en la pantalla grande. Y, ¿qué decir de su contraparte? Emma Stone en un film de Yorgos Lanthimos es, hace rato, sinónimo de grandeza, de un nivel altísimo y de grandes dosis de excentricismo. En fin, Yorgos, seguí haciendo lo tuyo siempre y, si podés, seguí haciéndolo con Jesse y Emma.