Reseña | Cine | Gladiador 2

La esperadísima secuela de Gladiador finalmente llegó a los cines después de 24 años. 

La historia transcurre en el 211 d.C, unos 20 años después de la original.

Lucius fue exiliado de Roma por su madre, Lucila, para su resguardo y creció en Numidia, una región del norte de Africa. Hanno, tal el nombre que utiliza Lucius, nos muestra en las primeras escenas que formó su familia y que tiene dotes para ser un gran guerrero. Pero todo cambia cuando es apresado y esclavizado por el general Acacius, interpretado por un Pedro Pascal en un papel que no tiene grandes puntos donde destacarse pero es acertado. Como así también la interpretación de Joseph Quinn en el papel de Geta, uno de los emperadores de Roma junto a su hermano Caracalla, que encarna con coherencia a un ser inestable y cruel. 

Paul Mescal se preparó mucho para este papel y se nota. La interpretación del actor resulta convincente mostrando la evolución de su personaje hasta convertirse en un gladiador decidido.

El papel de Denzel Washington como Macrinus es uno de los puntos más fuertes de la película. Su interpretación es rica en matices, aporta una profundidad a su personaje que lo convierte en un antagonista fascinante, lejos de ser un simple villano puede verse como va desplegando toda su ambición de poder.

El director Ridley Scott demuestra una vez más su maestría en la dirección de grandes producciones históricas. Gladiator 2 es un espectáculo visual impresionante. La recreación de la antigua Roma es detallada y envolvente, transportando al espectador a un mundo de gladiadores, intrigas políticas y luchas por el poder. Las secuencias de batallas son espectaculares pero algunas también inverosímiles: simios salvajes, un rinoceronte, tiburones y agua en medio de la arena de un coliseo que, no desentonan con la historia pero resultan poco probables en la época en que se narra el film.

Es una épica sobre "fuerza y honor", una historia que ofrece una experiencia cinematográfica sólida y emocionante. Es una buena secuela pero imposible no compararla con la primer entrega. Recomendada para aquellos que disfrutan de los grandes espectáculos históricos y las batallas épicas.